¿Qué es el guardabarros o guardafangos de un auto y para qué sirve?

Ya hemos comentado en decenas de ocasiones que los coches tienen más piezas de las que puedes imaginar. De hecho, dependiendo del automóvil, el número de piezas y componentes varía muchísimo.

Una de las piezas cuyo nombre es conocido, pero su función bastante desconocida, es el guardabarros, guardafangos o salpicadera. De hecho, si le preguntará ahora mismo dónde está esta pieza... ¿sabría contestarme?

Seguro que no. La buena noticia es que, tras leer este artículo, sabrá dónde está y para qué sirve. Nunca se acuesta uno sin saber algo nuevo, ¿verdad?

¿Qué es el guardabarros?

El guardabarros es una parte de la carrocería del automóvil (y de las motocicletas o bicicletas) que rodea las ruedas del mismo. Suele ser ese "resalto" que hay alrededor de la rueda en la carrocería y que sale un poco hacia fuera.

Dependiendo del vehículo el guardafangos puede ser de muchos tipos. Desde los más pronunciados y típicos de los autos clásicos hasta los más delicados y casi imperceptibles de los más modernos.

Aun así hay muchos coches de nueva fabricación cuyos guardabarros destacan en la carrocería, sobre todo los deportivos. Debido a que su altura suele ser pequeña el guardabarros y su forma circular llama mucho más la atención que en otros coches de gama media.

¿Cuál es la función del guardafangos?

Con las diferentes acepciones del nombre se puede imaginar para qué sirve. Aun así, se lo explicamos. El guardabarros tiene como objetivo evitar que, al circular por carretera o caminos, las rocas, líquidos, lodo o arena que entran en el neumático salgan disparadas.

Imagine la cantidad de pequeñas rocas y arena que entran en las ruedas de su auto. Y ahora imagine que, sin el guardabarros, toda esa suciedad sale disparada hacia los peatones y otros vehículos a una gran velocidad. ¿No parece muy seguro no?

Por este motivo el guardabarros tiene una función más de seguridad para el resto que para la nuestra. De hecho, dependiendo del vehículo, a veces incluso los guardabarros son complementados con faldones, sobre todo en los coches todoterreno o SUV.

¿Sabía qué era el guardabarros?

Le dijimos que al acabar este artículo sabría qué es el guardabarros. ¡Y ahora no puede decir que no hayamos cumplido con nuestro cometido!

Esta parte de la carrocería, que parece tan insignificante, salva vidas (y otras carrocerías) a diario. Sin ellas veríamos volar piedras y todo tipo de residuos desde la rueda hacia todas partes a diario.

¿Conocía la función del guardabarros? ¿En qué estado están los de su coche? Si quiere, puede echarle una foto a los mismos y la subimos a este artículo.

Mantenimiento del guardabarros 

El mantenimiento del guardabarros es muy sencillo. Se limpia constantemente para evitar la presencia de pegamento en la carretera. Durante la limpieza, la suciedad del ala se elimina con agua y jabón. También es aconsejable comprobar regularmente el estado de la estructura. La conducción brusca, especialmente en carreteras con baches, puede provocar choques que aflojen el ala y eviten daños mayores.

Las aletas son especialmente útiles cuando se conduce por carreteras mojadas, nevadas o embarradas, ya que impiden que los elementos corrosivos penetren en las partes sensibles del vehículo y protegen a los demás conductores. Si faltan aletas, deben ser sustituidas inmediatamente por la seguridad del vehículo y de los demás usuarios de la carretera.

Historia del guardabarros

El uso de los guardabarros comenzó con los primeros automóviles para evitar que el barro arrojado por debajo de las ruedas acabara sobre el conductor y los pasajeros. Sin embargo, su uso no se generalizó hasta mediados del siglo XIX. La llegada de los coches de motor no supuso un cambio significativo en la forma, por lo que el ala no se modificó. Por coherencia, se sustituyó por cuero y madera, conservando esta parte su forma independientemente del resto del cuerpo.

Originalmente, el guardabarros constaba de dos partes, cada una de las cuales cubría la mitad de la rueda (delantera o trasera). En 1899 se integraron en el tren de aterrizaje. Hacia 1910 aparecieron los primeros guardabarros traseros en la carrocería y tres años después se estableció la continuidad de la carrocería con los guardabarros delanteros. Sin embargo, estos elementos aún no eran objeto de estudios estilísticos.

En la década de 1920, los coches comenzaron a construirse con una visión más estilizada y los guardabarros, como el resto de la carrocería, se convirtieron en objeto de atención por parte de los carroceros, que produjeron una variedad de formas extravagantes.

El apogeo del diseño de alas se produjo en los años 30, la época dorada de los carroceros franceses. A partir de estos diseños, influenciados por las preocupaciones aerodinámicas, se inició la plena integración del ala en la carrocería. Sin embargo, fueron los diseñadores estadounidenses quienes establecieron la punta del ala como un componente por derecho propio:

• En los años 50, la línea del ala se adaptó al diseño general del coche.
• En los años 60, el estilo dominante era austero, lineal y funcional. Originalmente predominó sobre todo en Europa, donde dio lugar a una cierta uniformidad de estilo que sólo se modificó mediante ajustes en los grupos de luces y en los adornos.

Cuidado de los guardabarros de tu vehículo

Su tarea es hacer que se vean bien. Para ello, debes saber cómo mantener correctamente los guardabarros de tu coche. Algunos sencillos consejos te ayudarán a cuidar los guardabarros de tu coche.

• Conduce con cuidado: tu estilo de conducción y la velocidad afectan al estado de las aletas de tu coche. Aunque las alas de tu coche sean fuertes, debes tener cuidado al conducir por un terreno accidentado. Debe reducir la velocidad en estas carreteras, de lo contrario los guardabarros de su coche podrían resultar dañados.
• Inspección periódica: siempre es aconsejable que los guardabarros de su coche sean revisados periódicamente en nuestro taller. Si se detectan daños, podemos repararlos en cuestión de minutos.
• Limpieza: el lavado regular mantiene las alas en buen estado. Esto puede hacerse fácilmente en casa. Primero aclare las solapas con agua limpia y luego frótelas suavemente para evitar que se rayen.

Flaps de barro o guardas de salpicaduras como accesorio

Las aletas de barro se montan en las ruedas de un vehículo para reducir las salpicaduras de agua, piedras, suciedad o nieve. Los términos "alerones" y "guardas" tienen el mismo significado, la única diferencia es el uso de estos términos en diferentes regiones.

A menudo, un coche nuevo se entrega sin aletas. Si conduces en el barro, la lluvia, la nieve, el agua o la suciedad sin faldones, corres el riesgo de dañar tu coche o causar problemas a otros conductores que vienen detrás. Como accesorio para el coche, evita que la suciedad se deposite en las partes más vulnerables del coche, especialmente en los bajos, que son muy propensos a la corrosión y al óxido debido a factores ambientales.

Las aletas de barro son una buena inversión para su coche y le ahorrarán dinero y tiempo a largo plazo. Pueden soportar una amplia gama de condiciones de conducción y proteger los bajos del vehículo, especialmente en el caso de los SUV que se conducen en condiciones extremas la mayor parte del año.